| ( Número del tomo 19; Página 331) |
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Fatwa N°7725
Pregunta: Soy una mujer egipcia que vive con su esposo desde hace siete años en
Alemania, el primer problema entre nosotros tuvo lugar cuando quede embarazada
inmediatamente después del casamiento, cuando mi esposo se enteró del asunto se volvió
loco, buscaba un hospital hasta que encontró uno, en aquel tiempo estaba embarazada de
tres meses y no sabía nada ni entendía una jota de la lengua alemana, por lo tanto respeté a
su deseo y aborté el feto, se alegaba que los niños cuestan mucho. Es digno de mencionar
que mi esposo tiene un hijo que es de una mujer austriaca y come cerdo, bebe el vino y no
sabe nada sobre el Islam. Mi esposo le trae todo lo que quiere. Mi esposo también bebe el vino,
y todas sus costumbres son europeas. Es que intentaba con él para dejar esta vida pero en
vano. Soy musulmana y estimo mi religión, ¿Es ilícita mi vida con este hombre? quiero
divorciarme de él y regresar a mi patria ¿Está prohibido eso? ¿Y cuál es el veredicto
acerca de su deseo pues no quiere tener hijos de mí?
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Respuesta: Primero, si tal es el caso, respecto a abortar el feto, ambos ustedes son pecadores por
abortarlo debido al odio de su esposo a los hijos y su consentimiento al hacerlo. Segundo, si
esposo bebe el vino, come el cerdo y da de comer el mismo a su otra esposa y usted quiere
divorciarse de él por eso, entonces usted no incurre en falta al hacerlo, si el esposo acepta y se
divorcia de usted, está bien y el problema se acaba; pero si no, la separación entre ustedes se incumbe
del tribunal legal.
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